sábado, 20 de noviembre de 2010

Cuando no se ni de que hablo

Yo no creía en ti.
Tampoco confiaba en mi juicio,
tan fino, tan vago
y a punto de quebrarse en cualquier momento
Lenguajes de cortina
rasgaduras de cristal
tan rumiantes, tan inocentes
al fin y al cabo
saltando de extraños a cotidianos
No me lastiman
tal vez solo me vigilan
como si yo guardara algo
que mi ser desconoce
pero que todo el viento lo susurra
Tranquila intangibilidad
me vela cuando entrecierro los ojos
y destellos con sombras me hacen dudar
No entiendo lo que no hay en verdad.
Morados y azules entintan las nubes
Naranjas violentos retumban detrás
cíclico bajo el marco.
Silencios que interrumpes,
ironías que predices
pasos que me hacen parpadear
Yo no creía en ti
tampoco confíaba en mi juicio
tan frió, tan ralo.

2 comentarios:

Choco dijo...

Hola! Después de tanto tiempo te comento por fin :) Me gustó mucho el poema, sobretodo donde dice que guardas algo que tu ser desconoce.
También me gustó el ritmo que tiene, que es mas notorio donde hablas de los colores y las nubes y el detrás, que rima con intangibilidad, dudar, parpadear. Sé que a lo mejor ni siquiera buscabas la rima, pero no se escucha mal, a mí me gusta. Saludos

Sadicrow dijo...

Lo que me gustó de este poema es que lo leí todo de una intención. Tiene una manera muy simple de ser entendido. Me agradó.